Azul

Esta puerta se abrió para tu paso.

Este piano tembló con tu canción.

Esta mesa, este espejo y estos cuadros

guardan ecos del eco de tu voz.

Es tan triste vivir entre recuerdos...

Cansa tanto escuchar ese rumor

de la lluvia sutil que llora el tiempo

sobre aquello que quiso el corazón.

No habrá ninguna igual, no habrá ninguna,

ninguna con tu piel ni con tu voz.

Tu piel, magnolia que mojó la luna.

Tu voz, murmullo que entibió el amor.

No habrá ninguna igual, todas murieron

en el momento que dijiste adiós.

Cuando quiero alejarme del pasado,

es inútil... me dice el corazón.

Ese piano, esa mesa y esos cuadros

guardan ecos del eco de tu voz.

En un álbum azul están los versos

que tu ausencia cubrió de soledad.

Es la triste ceniza del recuerdo

nada más que ceniza, nada más...

Homero Manzi

Nunca pensé que ver un programa del corazón pudiera aportarme algo hasta anoche cuando oí esta poesia. Algo bueno tenía que tener quedarse en casa.

Empresas guay

Hace poco leía en el blog de Craso que estaba muy "feliz" con su empresa guay. En aquel momento yo estaba a punto de entrar a trabajar en una empresa y deseaba que no lo fuese tanto como la suya. Desafortunadamente, estoy comprobando que la mía es super-mega-requete-guay. Me han mandado una semana a Barcelona a hacer el curso de formación, me lo pintaron muy bien, que si hotel pagado, que si todo incluido... y aquí que me vine yo con ganas de disfrutar de estos días aunque en principio fuese por trabajo.

La realidad: Vuelo con escala, salida a las 7 de la mañana, madrugón, retraso y maleta rota. La compañía aérea no se hace responsable de cubrirle el daño a mi querida maleta Samsonite que tanto esfuerzo me costó comprar porque según ellos la pieza que le han arrancado de un golpe es un daño causado por el uso y desgaste natural de la maleta.

Una vez que llego 2 horas más tarde me dicen que no había más habitaciones libres en el hotel donde nos vamos a alojar y que otra chica, a la que no conozco de nada, y yo vamos a compartir habitación hasta que haya una habitación disponible "que seguro que es pronto, eh? Además vuestra habitación es más grande..." Al llegar al hotel todo el mundo tiene habitación doble, como la nuestra, para ellos solos. La promesa de "os cambiaremos en cuanto sea posible, no tenemos más habitaciones libres" sigue sin cumplirse y ya llevamos aquí 3 días. La chica es una petarda, una cotorra y le estoy cogiendo un poco de manía. Esta tarde me han dado un notición en recepción: "si el director lo autoriza" mañana puede que me cambien de habitación.

Para rematar la faena el "todo está cubierto" se refiere a que nos abonarán los gastos una vez que presentemos los tickets de compra y solo de la comida al final de mes. Eso también lo podían haber avisado antes, digo yo.

Estoy cansada, tengo ganas de estar a gusto un rato solita y me está a empezando a tocar las narices esta gente de la empresa y los del hotel.

He tomado la determinación de que nunca más me quedaré en un Barceló porque son muy poco amables en recepción y ni se me ocurrirá poner un pie más en un vuelo de Spanair. El problema es que no estoy en posición de decir que no iré a trabajar nunca más porque ni siquiera he empezado....

Solo espero que el comienzo en la empresa no sea tan prometedor como el previo.

Creo que me voy a ver Barcelona, a ver si se me quita un poco el mal humor.

Indefinido

Tras 5 días en la capital del reino con poco descanso, donde he descubierto que soy más diplomática de lo que creía, dos viajes de 8 horas en bus (el último me ha forzado a estar 48 horas en plena actividad sin dormir), la llegada a casa sin preguntas ni alegría por mi vuelta y un parte desesperanzador de la situación en mi humilde morada, solo tengo una palabra para definir mi estado de ánimo: indefinido.